El Cardenal Juan Luís Cipriani es el primado de la Iglesia Peruana, pero a nadie sorprende que sus preocupaciones sean muy terrenales cuando se trata de defender el poder. Por ejemplo, hace poco ha dicho que los DDHH son instrumento de un grupo ideológico, como una manera de desprestigiar el trabajo de la Comisión de la Verdad. Bueno, no podíamos esperar menos de quien dijo que: “Los DDHH eran una cojudez” o “Que los homosexuales somos mercadería fallada”, entre otras perlas. Las destempladas declaraciones del Cardenal podrían ser anecdóticas sino fuera porque hay una muy orquestada campaña desde las fuerzas más conservadores del país (el APRA y el Fujimorismo) para deslegitimar el trabajo de DDHH, como medio de abrir paso para la amnistía que asegure la impunidad de los violadores de DDHH, en especial en el contexto del juicio del ex dictador Alberto Fujimori.
Sobre eso debemos estar alertas, ya que no es gratuito que el Cardenal Cipriani, el Vicepresidente Giampietri, el Ministro de Defensa y la Familia Fujimori, coincidan en la cruzada anti DDHH, algo traman, y no es casual, ya que todos de una u otra manera estuvieron muy comprometidos con la guerra sucia de los ´80 y ´90; si algo nos queda claro es que no son nada santas las declaraciones del Cardenal, algo prepara, no en vano es el vocero de las fuerzas más retardatarias de nuestro país.
El Cardenal Juan Luís Cipriani es el primado de la Iglesia Peruana, pero a nadie sorprende que sus preocupaciones sean muy terrenales cuando se trata de defender el poder. Por ejemplo, hace poco ha dicho que los DDHH son instrumento de un grupo ideológico, como una manera de desprestigiar el trabajo de la Comisión de la Verdad. Bueno, no podíamos esperar menos de quien dijo que: “Los DDHH eran una cojudez” o “Que los homosexuales somos mercadería fallada”, entre otras perlas. Las destempladas declaraciones del Cardenal podrían ser anecdóticas sino fuera porque hay una muy orquestada campaña desde las fuerzas más conservadores del país (el APRA y el Fujimorismo) para deslegitimar el trabajo de DDHH, como medio de abrir paso para la amnistía que asegure la impunidad de los violadores de DDHH, en especial en el contexto del juicio del ex dictador Alberto Fujimori. 
Sobre eso debemos estar alertas, ya que no es gratuito que el Cardenal Cipriani, el Vicepresidente Giampietri, el Ministro de Defensa y la Familia Fujimori, coincidan en la cruzada anti DDHH, algo traman, y no es casual, ya que todos de una u otra manera estuvieron muy comprometidos con la guerra sucia de los ´80 y ´90; si algo nos queda claro es que no son nada santas las declaraciones del Cardenal, algo prepara, no en vano es el vocero de las fuerzas más retardatarias de nuestro país.
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