Testimonio: ¡Gracias, querida Susana!

Testimonio de Manuel Herrera, nuestro ex director: Honestidad, calidez y calidad humana en la Política

Escribe: Manuel Herrera Loayza

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Nunca una mujer impactó tan profundamente en mi biografía como Susana Villarán, la periodista, la comunicadora, la activista, la política, la madre y la amiga.

Lo que más gusta de ella es su sencillez y su calidad humana que la hacen auténtica: amorosa, cálida, sencilla, coloquial, alegre, jovial, honesta, confiable, horizontal, culta, libertaria, crítica, demócrata, librepensadora, empática, sensible, comunicativa, luchadora, valiente, perseverante, creativa e innovadora.

Conozco a Susana desde 1990, cuando yo era muy joven. Comencé a laborar con ella y otro buen amigo (Luis Llontop), como asistente de producción en el programa radial Signos, “La Voz de la Vida” o “La Vida hecha Noticia”, que producíamos en el Área de Comunicaciones del Instituto Bartolomé de Las Casas-Rímac, y que transmitimos varios años por Radio Cadena, Radio Santa Rosa y CPN-Radio.

Yo apenas había iniciado mis estudios de Periodismo, pero, con Susana, tuve la valiosa oportunidad de entrar como practicante y unirme al equipo de periodistas que producía tanto el programa radial como el quincenario Signos, entre otras labores periodísticas.

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Eran tiempos del conflicto interno en nuestro país, donde la violencia y las violaciones de derechos humanos eran pan de cada día. En este contexto, desde nuestra labor comunicativa, constantemente rechazamos siempre toda forma de violencia y terrorismo, y alzamos en alto nuestras voces a favor de una cultura de paz, la defensa de la vida, y la promoción y defensa de los derechos humanos y ciudadanos. Haciendo eco de las voces de las y los más pobres.

Ella, como directora, lideraba a nuestro equipo. En tantos años de trabajo, el cariño y la amistad fluyeron, y logramos establecer fuertes lazos personales, laborales y profesionales.

Trabajar con Susana fue para mí una experiencia muy grata y rica de aprendizajes múltiples para mi vida. Desde que la conocí y hasta la actualidad, ella es un modelo de referencia y fuente de inspiración para mí, porque su biografía, su discurso y su práctica de vida –honestidad, coherencia, integridad, profesionalismo, solidaridad y compromiso social con las y los excluidos– calaron hondo en mí, y motivaron mi desarrollo personal, laboral y profesional como periodista-comunicador, como activista-defensor de derechos humanos, como educador en derechos humanos, y como investigador en ciencias sociales.

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Fue un privilegio tenerla como amiga, maestra, apoyo y brújula de ruta en algunos momentos difíciles y en otros de victoria. Recuerdo cuando yo tenía muy poco tiempo de haber salido del cruel clóset, pero aún me movía entre temores y resistencias. En aquel momento, las palabras de Susana fueron poderosísimas para mí, para lograr dar el gran salto ciudadano:

“Se trata de ti... a quien yo quiero, que tienes un nombre, que estás en la memoria de mi corazón. Que lo estarás siempre: hetero u homosexual. Lo que importa es que seas feliz, así de simple. Tú sabes que no será fácil, pero lo que importa es que seas digno, que sigas siendo luchador; que ahora, más libre y con más coraje, incorpores a tu lucha, la lucha por el respeto a tu diferencia. Estarás en esto, como en todo lo demás, estoy segura...”.

Esta cita es parte de la “Carta a un Amigo” que Susana me escribió. Su carta me dio mucha fuerza, la releí muchas veces y me reconfortaba. Todo joven LGBT quisiera recibir una carta igual de parte de su madre o de su padre. Fue muy lindo poder contar con Susana. Entonces comprendí y asumí el desafío de bregar tercamente contra la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género, y por la justicia, la igualdad y el reconocimiento de derechos de la población LGBT, dentro del marco de protección y promoción integral de todos los derechos humanos para todas y todos.

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Yo escribí una primera versión de este texto para mis amigos del colectivo Raíz 2.0, jóvenes activistas LGBT, como una forma de presentarles a Susana y para invitarles a conocer las propuestas y el plan de gobierno municipal de Fuerza Social, llamándoles a reflexionar sobre la importancia de emitir un voto consciente, informado, libre y responsable.

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Ahora hago eco de esta nueva versión para el Boletín Diversidad, con el fin de invitar a la población LGBT de Lima –activistas y no activistas, feministas y no feministas, personas dentro del armario y las fuera de él- a reflexionar sobre la importancia de emitir un voto informado, libre y responsable, muy consciente de que esta es la primera vez que se nos presenta la posibilidad de elegir a la mejor candidata para la alcaldía metropolitana de Lima, Susana Villarán (Fuerza Social), quien es solidaria con las comunidades LGBT y con otros grupos discriminados y excluidos. Es momento de parar, con nuestros votos ciudadanos conscientes, a las derechas homofóbicas y transfóbicas, como la representada por el actual alcalde de Lima.

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En un diálogo reciente con Óscar Ugarteche, apreciado amigo y admirado referen.te activista, le pregunté sobre qué podría decir, en el contexto actual de elecciones municipales, a las y los jóvenes peruanos, principalmente LGBT. Él me respondió:

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“Yo no sé qué piensa la gente joven en el Perú, pero espero que los jóvenes puedan construir un espacio nuevo, más libre, y que puedan consolidar los espacios libres que nosotros construimos en la década de los 80 y primera parte de la década de los 90, y que se han cerrado en la última parte de los ’90 y en nuestra primera década de este siglo. Yo espero que consoliden los espacios de apertura y consoliden los espacios de libertad, porque si uno no es libre en su fuero interno, no es libre en ninguna parte. Y la libertad no está fuera de uno, está dentro de uno, y uno hace que el medio sea el medio que uno necesita para la libertad de uno. Y eso es una construcción social, eso no lo hace una persona, eso se hace entre todos. Pero hay que ser libres para hacer eso, si no lo eres, estás fregado.”

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Por último, ¡gracias, querida Susana! Porque, hoy, mucha más gente en Lima también te conoce y va a votar por ti, porque le inspiras confianza, porque gusta de tu honestidad y tus propuestas, porque te has convertido en una fuente de inspiración, participación y esperanza ciudadanas, porque sí te importan las personas, y porque los afectos sinceros, los sentimientos y las emociones no son obstáculos para la buena Política (con mayúsculas), sino todo lo contrario, ya que pueden ayudar a detonar procesos sociopolíticos de cambios positivos para la vida de las personas, y motivar su activa participación colectiva con todos sus talentos, inteligencias y habilidades, colocados al servicio de Lima y sus ciudadanas y ciudadanos. Hoy, lejos de la tierra pero muy próximo a ti en esta contienda, tengo para ti sólo pensamientos, sentimientos y deseos de mucha gratitud, cariño, respeto, confianza, admiración y éxito.

Manuel Herrera, fue el primer director del Boletín Diversidad, es activista de Raíz 2.0-defensor de derechos humanos, colaborador y partícipe en organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales. Licenciado en Periodismo (Universidad Bausate y Meza ). Magíster en Estudios Políticos y Sociales (Universidad Nacional Autónoma de México-Facultad de Ciencias Políticas y Sociales). Doctorando en Estudios Latinoamericanos de la UNAM-FCPyS